Resumen: El nombre de Juan Carbó Álvarez, parece disiparse en las páginas inéditas de la historia de Campeche; una que otra vez surge en un acontecer, y sólo ocasionalmente su figura se presenta, cuando se recuerdan los esfuerzos emprendidos por conseguir vida constitucional a nuestra entidad.
Hombre modesto —que no mediocre—, seguir su itinerario no ha sido tarea fácil: sea por la lucha de partidos políticos o por que sus compañeros tuvieron mejor suerte en la posteridad, su perfil es de colores muy suaves y apenas lo percibimos después del tiempo transcurrido, es decir, hace más de una centuria.
Hoy queremos rescatar su personalidad, estimando la justicia que le adeudamos, en virtud a que fue defensor de la patria y uno de los fundadores del Estado de Campeche, méritos que justifican las presentes líneas.
Su vida fue breve: nació en la ciudad de Campeche en 1832, hijo de José Carbó y Catalina Alvarez, naturales de Barcelona, España. Casado con la señora Concepción Campos; falleció en Santecomoapan, Estado de Veracruz, el 12 de julio de 1882, víctima de un ataque apopléjico, a la edad de 50 años .
Muy joven se inició en la política local, respondiendo esa actividad a las características de la época, cuando periodismo y política eran tribunas de expresión socio-económica; talento y pluma fueron para Carbó un paralelo de servicio público.