Resumen: La actividad parlamentaria de Guillermo Prieto constituye un aspecto sobresaliente de su larga e infatigable lucha política. Durante casi treinta años desarrolló una amplia y vigorosa actividad legislativa como ideólogo y defensor del liberalismo progresista mexicano.
Participó en quince legislaturas, pronunció decenas de discursos, intervino en múltiples y diversos debates algunos de importancia y otros de significación secundaria y siempre se les respetó y consideró como uno de los más eminentes oradores parlamentarios.
Cuando fue diputado por el estado de Puebla, Prieto dio batallas memorables en el Congreso Constituyente de 1856-1857, durante los históricos debates sobre los artículos constitucionales respecto a los derechos individuales, la libertad de pensamiento, de imprenta y de cultos.
Los liberales mexicanos partidarios en materia económica del pensamiento clásico, lucharon con la misma vehemencia y decisión por la libertad de comercio y, asimismo, se opusieron a las trabas aduaneras, a las fronteras interiores y, en especial, al impuesto colonial de las alcabalas. En este sentido, Prieto fue terminante: "Es insostenible una contribución que pesa sobre las necesidades del pobre, que recae sobre el consumo, que introduce el desnivel en el comercio y viene acompañada de la delación, del espionaje y de las trabas más odiosas y absurdas".