Resumen: Una visión global de la personalidad ha de tener presente sus dos polos: el individual y el social, dos dimensiones complementarias e indivisibles de una misma realidad.
La psicología moderna reconoce la tendencia individual a desarrollarse, a expansionarse y a conquistar el mundo exterior. Por esto coloca el acento sobre el fenómeno de la socialización, entendida como proceso a través del cual el individuo se integra en una sociedad y se adapta a las formas y a los modos de vida de la misma. Labor esencial de la acción educativa en favorecer este proceso.
El libro se compone de una introducción y de dos partes. En la introducción se puntualiza la problemática de la educación social, cuya naturaleza se precisa y cuyos cometidos, agentes y criterios metodológicos se describen. En la parte primera parte se discute el comportamiento social como forma operativa, se especifican sus modalidades de realización, sus factores de condicionamiento y sus expresiones de adaptación o de desadaptación. En la parte segunda, de carácter aplicado, se examinan las modalidades de intervención para los fines de la acción educativa. Se considera cuatro aspectos: diagnóstico, educativo, reeducativo y terapéutico.

Bibliografía: p. 343-369

Índice: p. 377-380

Título original: La personalità in prospettiva sociale